viernes, 9 de enero de 2009

EL INFIERNO EN MAJAZ (a) “MATAZ”

Fueron salvajemente golpeados. Se les mantuvo encapuchados con bolsas roceadas con polvo lacrimógeno. Incapacitados para respirar. Solo alcanzaban vomitar. Durante tres días los mantuvieron así. Descalzos y sin sus abrigos. Uno murió baleado. Dos mujeres fueron víctimas de vejaciones sexuales. Todo eso ocurrió en el campamento minero ilegal del proyecto minero Majaz (a) “Mataz”.
El fiscal calló. Un médico emitió certificados falsos. Quisieron borrar las cicatrices de estas violaciones a los derechos humanos de 28 comuneros de Ayabaca y Huancabamba (Piura) y el periodista Julio Vásquez. No lo lograron. Tampoco lograron silenciar la muerte del comunero Melanio García. La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) acaba de publicar estas fotografías exclusivas que se constituyen en prueba irrefutable de aquello que sucedió en agosto de 2005.
¿Los autores?, efectivos de la Policía Nacional del Perú y personal de seguridad de Majaz. ¿El fiscal que calló? Félix Toledo Leiva. Todos están denunciados, al igual que el médico que faltó a la verdad. Corresponde una pregunta: este gobierno que defendió a capa y espada el ingreso (al caballazo) del proyecto Majaz y descalificó la consulta popular, ¿intervendrá para ocultar lo evidente?
Urgente: Ver el informe completo de la CNDDHH haciendo click aquí. Nos aunamos a la condena de estos hechos. (Todas las fotos corresponden a la CNDDHH).

Enlaces:
La República: Testimonios de víctimas y cómo murió el comunero Melanio García.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La actividad minera es una de las actividades extractivas en nuestro país, generenado más del 50% de las divisas. Sin embargo, lo ocurrido en Majaz es un hecho condenable. Al Estado sólo le interesa la inversión, y no los derechos de las comunidades, contaminando su medio ambiente.

Los responsables de la muerte de Melanio García no debe quedar impune, ni las torturas a los cuales fueron sometidos los comuneros sólo por querer hacer cumplir sus derechos.

¿Qué dirán los representantes de la Majaz?, ¿el fiscal corrupto?, y ¿los torturadores (efectivos policiales)?.